jueves, noviembre 23, 2006

Valor de madre: Segunda parte


"Cuando descubri todo lo que mi hija habia hecho a mis espaldas intente buscar una explicacion razonable, pense que quizas tenia miedo a decirme la verdad. Le acaricie el cabello y note que lo tenia aspero, enseguida le quite las manos de encima: no habia duda que no era ella, no era la misma. La mire a los ojos intentando comprender sus acciones, la llame 'hija' y ella ni me miro a la cara. Seguidamente le dije que no podia culparla porque ella era una mujer enamorada, una mujer con miedo. Sus respuesta fue inmente, ella simplemente estaba haciendo su vida y jamas me tuvo miedo sino que nunca sintio una afinidad de madre-hija para contarme su vida porque simplemente no me soportaba como madre, como amiga, como mujer. Me dijo que era normal que el barrio me tachara de arisca y que apenas me hablara con nadie y me cuestiono como podia tener si quiera una amiga siendo tan cardo, siendo tan... La abofetee antes de que acabara y sin contemplaciones me dijo que no le extranaba que mi marido se hubiera 'ido de putas' que no le extranaba que 'el papa' no me quisiera porque no valia para nada. Una fria lagrima recorrio mi arrugada cara y note que otra arruga me salio en ese instante debajo el parpado y que detuvo mi lagrima. La culpe de tal hecho, ella se estaba conviertiendo en un problema para mi y le pedi que se fuera y que hiciera su vida que yo ya no la iba a detener, que se fuera con su padre porque en mi casa no tenia cabida, ni ella ni el marido. Se fue y senti un alivio muy dentro de mi. Ya no tendria que soportarlos!!! como dice el dicho 'mejor sola que mal acompanada' no queria vivir con el enemigo en casa. Es muy fuerte admitirlo pero mi propia hija era el mismisimo diablo para mi. Pasaron los meses y supe que estuvo viviendo con el padre por 2 meses y que despues volvio a Australia. No senti su ausencia en lo mas minimo, mas bien me senti relajada, feliz por mi misma... Un dia llego a mi casa una carta a mi a nombre de una tal Kate, la abri extranada al ver que el apellido era el de mi hija, y asi descubri que era de la embajada de Australia y que ella ya no se llamaba Raffaela 'anymore', sino Kate. Se cambio el nombre en Australia. Cogi un sujetador que tenia en el armario de la que fuera mi hija, me fui a la montana, cabe un hoyo en el suelo y lo enterre: habia enterrado a mi hija: habia enterrado a Rafaela, ella misma renuncio a ser Rafaela, el nombre que yo misma le di, mi propio nombre..."
Continuara

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta historia me encanta esta mujer es la hostia y una caja de sorprerssa y su vida interesa mas que la de su hija, sin duda le esta quitando protagonismo.

Anónimo dijo...

Pronto en el late night habra un docuemnetal sobre la vida de Raffaella vista a traves de los ojos de su madre. Sera 'Valor de Madre' y lo presentara Milka: Que pasa cuando tus propios hijos hacen de tu vida un infierno? Hemos seguido la estremecedora historia d euna mujer, la historia de Rafaela.

Anónimo dijo...

ajajjaja y aun hay mas lio!!!